martes, 15 de noviembre de 2016

Enhorabuena a mi misma por "criticar" a Slevin.

He empezado esta crítica ya un par de veces y las he borrado todas (si no fuese así ya estaría publicada y me ahorraría el tener que disculparme por tardar).
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Lo cierto es que no sé cómo criticar "El caso Slevin", algo que no me pasó con ninguna de las películas anteriores.
Ya sea porque hubo aspectos que no me gustaron, ciertos fallitos que quise destacar o todo lo contrario, siempre encontré algo que me motivase a hacerlo. ¡Y joder! me encanta criticar, analizar una película con sus pros y sus contras e incluso ponerme hater porque sí. 
Así que empiezo a pensar que el fallo no es mío si no de la película en concreto.

"El caso Slevin" es correcta, tan correcta que me da pereza.
Meterme con los actores, con el guión, o con el giro de éste al final, sería rizar el rizo. Tiene un género muy marcado y cumple todos y cada uno de los estereotipos. Todos los personajes son muy carismáticos, de lo reconocibles que son parecen caricaturas, todos tienen matices pero todo muy previsible y eso, que se ciñe al género.

A mi parecer la película no aporta más que entretenimiento (del montón bueno, eso sí).

Es que hasta las transiciones, las localizaciones, los decorados y el vestuario tienen un estilo fácilmente reconocible. Yo que se. Sigo sin querer meterme con ella porque todo lo que digo está bien hecho, sin más.

"El caso Slevin" es como ese compañero que cae bien a todo el mundo, que saluda con una sonrisa (pero que no se nota forzada), siempre atento con los demás y con ganas de ayudar, quizás no destaque mucho en clase y sea de sacar 6 pero sin a penas esfuerzo las cosas que hace las hace bien. ¿Como iba a meterme con alguien así?

O con alguien así.

La simpleza bien construida a veces es de agradecer.
La película se esfuerza en que detrás de una trama poco original se encuentre un plantel de actores bastante decente (a golpe de talonario, claro), cuida muchísimo el apartado visual, como dije antes, aunque me es inevitable que no deje de chirriarme un poco el tono que tiene. No se si fue porque quisieron despuntar en ese aspecto, pero no entiendo por qué tanto patrón geométrico y colorines en decorados y vestuario, muy rollo "te mezclo la estética setentera con la ochentera pero no te dejo demasiado claro en qué año estamos (o sí, pero ni cuenta que me di)". En fin, que aunque me haya chirriado no me parece una mala elección.

Veis, no soy capaz, a cada cosa mala que intento decir intento justificarla o buscarle la justificación.
Maldito Slevin, maldito Goodkat y maldito Kingsley... Así no se puede, me retiro. 

Josh Hartnett te da las gracias por haber elegido "El caso Slevin"

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