El Caso Slevin y el giro esperado

El Caso Slevin es una película de suspense en la que Slevin se nos presenta como una persona con muy muy mala suerte. Tanta que acaba involucrado en una guerra entre dos mafias y obligado a cometer un asesinato para saldar una deuda que nisiquiera es suya... o eso es lo que debería pensar el espectador medio hasta que el ''inesperado'' clímax de la historia le diese la vuelta a la tortilla.

No voy a hablar más de la historia que para decir que ese flashback aparentemente inconexo con el resto de la película hace que busques relación hasta desenmascarar antes de tiempo al asesino vengador que es Slevin. Ojo, no creo que esto sea un fallo en si mismo ni algo cutre, al contrario, crea ese sentimiento en el espectador de no saber que está sucediendo ni por qué durante mucho tiempo. Pero ( Y aquí el título de esta entrada ) creo que los espectadores contemporáneos como yo ya tenemos esta fórmula de presentación y giro tan tragada que se nos hace fácil intuirlo, igual que ''Shutter Island'', la conclusión de que es el loco es tan evidente como aquí la de que Slevin no dice toda la verdad. Y reitero, no es esto fallo del argumento ni mucho menos, sino, a mi juicio, una consecuencia de la cultura audiovisual que tenemos los jóvenes de hoy.



Bueno, fin de la mierda pseudointelectual pedante. Vayamos con Mr Smith o Mr Goodkat, ese misterioso parlíNO un asesino misterioso que no sabes como ni por qué está ahí hasta que él quiere que lo sepas. Mr. Goodkat es una presencia que está ahí de fondo en todo momento orquestando toda la trama visiblemente pero que de tal forma que el espectador no tiene ni idea de sus motivaciones para con Slevin. Decir tiene que la encarnación de la personalidad de este por Bruce Willis me para perfecta dada la inexpresividad y parsimonia con la que este enfrenta a todo el universo de la película. Solo hay que verle la expresión a este hombre, y si, la expresión porque no me jodas, no cambia en toda la película.

Con esta cara lo hice con tu madre

Oh shit

Y bueno, también hay una subtrama romántica con una mujer asiática que viste minifaldas a cuadros que bueno, es un personaje decentemente construido, con un par de rasgos característicos que hace que se pueda identificar y no parezca un muñeco. Esta subtrama le da un toque más humano a la imagen vengativa de Slevin, que al final de la peli se nos muestra como hará cualquier cosa con tal de vengarse, sacrificando a quienes sea necesario.

Y en fin, aquí está todo por hoy. No he comentado nada del montaje porque es lineal, continuado en el tiempo, y para mi no ha tenido nada que me llamase la atención. Me despido por esta semana y recomiendo esta película para pasar una tarde de lluvia en casa.